El Gobierno de Rajoy sigue ‘pagando’ el Prestige casi 15 años después
Voluntarios recogiendo chapapote en las costas de Galicia tras el vertido del Prestige. Europa Press
a mancha económica que dejó el hundimiento del Prestige en 2002 está tardando en desaparecer como el propio petróleo sobre las costas gallegas. Su rastro todavía se puede encontrar entre los datos oficiales flotando en forma de transferencias millonarias del Estado al Servicio Público de Empleo (SEPE), aunque sus márgenes son menos visibles que los del chapapote. Continuados informes del Tribunal de Cuentas han obligado a reflejar estas transferencias que el Ministerio de Empleo asegura que son, en realidad, un mero ajuste contable. Aún es la historia de un desastre.
Todo empezó hace casi 15 años. El 19 de noviembre de 2002, tras una semana de maniobras para evitar el desastre, se partía en dos un buque llamado Prestige, que navegaba al oeste del cabo de Finisterre con 77.000 toneladas de petróleo en su vientre. El fuel no tardó en contaminar al mar y teñir de negro las playas más cercanas.
El impacto ecológico en la zona alcanzó una dimensión difícil de calcular. Pero también salpicó a la actividad económica de las industrias locales, fundamentalmente pesqueras, y al propio Gobierno.
El 10 de diciembre de ese año, el entonces ministro de Interior y vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, comparecía ante la prensa para calificar de “pequeños hilillos de plastilina” a una fuga de 125 toneladas de crudo diarios.
Para amortiguar el impacto económico del Prestige en la zona, el Gobierno aprobó el Real Decreto-Ley el 22 de noviembre de 2002, que incluía reducciones en el Impuesto sobre Actividades Económicas correspondiente a ese ejercicio o una disminución de los módulos para la tributación por IRPF de los autónomos.
Además, para impulsar la contratación de trabajadores que se quedaron sin trabajo en las zonas afectadas a causa del vertido, incluía una bonificación del 100% en las cuotas de los empresarios a la Seguridad Social mientras durara la prohibición de pesca y marisqueo, considerándose dicho período como efectivamente cotizado.
En el caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) causados por el accidente, se permitió que el tiempo en que se percibieran las prestaciones por desempleo no computara como consumido a efectos de los límites máximos de cobro establecidos; al mismo tiempo, se podrían percibir prestaciones por desempleo aún cuando se carecieran de los períodos de cotización necesarios para tener derecho a ellas.
Por último, el decreto establecía una bonificación del 100% en el pago de las cuotas de la Seguridad Social por todas las contingencias a los empresarios y trabajadores de los armadores, a tripulantes de buques y a marisqueros, entre otros, que hubiesen visto paralizada su actividad.
Todo ello obviamente tuvo un coste millonario para la Seguridad Social.
Todo el texto en:
http://www.elindependiente.com/economia ... s-despues/
¿Pero no eran solo hilillosh de plashtilina??? su mala gestión seguimos pagandola todos 15 años despues... y lo peor de todo es que como premio le hemos dejado gobernar 2 legislaturas... (con el apoyo de PSOE y Ciudadanos)